Empatía

Empatía

Seguramente ya habrás escuchado o leído muchas cosas acerca de la empatía, pero a decir verdad, no es nada fácil aplicarla en nuestro día a día. Aunque es importante saber que resulta un aspecto fundamental para la inteligencia de cualquier persona, sobre todo bajo el punto de vista emocional. Para conocer más sobre la empatía, sus características, beneficios o posibles desventajas, no dejes de leer hasta el final y así descubrir si realmente eres una persona con empatía.

Índice
  1. ¿Qué es la empatía?
  2. ¿Cuáles son los componentes de la empatía?
    1. Saber escuchar
    2. Interpretar las expresiones
    3. Mostrar comprensión
    4. Prestar apoyo emocional
    5. Mostrar solidaridad
  3. ¿Por qué actuar con empatía?
  4. ¿Cómo cultivar la empatía?
    1. Pregunta para mostrar interés
    2. Lee guiones de teatro
    3. Elige a una persona
  5. ¿Se nace con empatía?
  6. ¿Cómo saber si una persona tiene empatía?
    1. Sensibilidad
    2. Emocionales
    3. Introvertidos
    4. Intuitivos
    5. Intimidad
    6. Pocas relaciones íntimas
    7. Conexión con la naturaleza
    8. Disponen de un gran corazón
    9. Curiosidad
    10. Opiniones a prueba
  7. ¿Hay desventajas al tener demasiada empatía?

¿Qué es la empatía?

De manera más específica, la empatía significa claramente aquello que se encuentra dentro de cada persona, pero también es el reflejo de todo lo que siente. Desde un punto de vista más claro, se asocia con la capacidad de ver y experimentar el punto de vista de otra persona.

Esto quiere decir que, una persona empática tiene la habilidad de conectarse con todo el entorno emocional de la otra persona, no solo de manera superficial, sino también de manera completa. Claro, para ello no es necesario que se comparta una igualdad de criterios y opiniones sobre lo que le sucede a la persona afectada, ni mucho menos estar de acuerdo con la situación.

Para que lo tengas un poco más claro es algo que fortalece nuestra sabiduría. En ese sentido, la persona empática también debe tener el poder de diferenciar aquellos estados de ánimo que sean afectivos y los que no, así como tomar una perspectiva objetiva de todo el panorama.

Qué es la empatía

Siempre se ha apoyado la creencia de diversos tipos de inteligencia, como la abstracta o artística, pero en el caso de autores reconocidos como Gardner (lee acerca de la teoría de las inteligencias múltiples de Gardner), comprende que cuando una persona inteligente no posee empatía, su comportamiento se torna completamente egoísta; bajo la incapacidad de entender las emociones o problemas del resto. Lo que también quiere decir que, a la persona se le dificulta seguir normas y respetarlas, acarreando problemas importantes en el ámbito laboral, social, interpersonal y familiar.

¿Cuáles son los componentes de la empatía?

Puede que en algunas situaciones hayas sido de los que necesita de una persona llena de empatía a su lado, sobre todo porque requieres ser escuchado pero de verdad, procurando recibir un apoyo y una comprensión en todos los sentidos. O por el contrario, puedes creer que no has actuado correctamente ante una persona que tenga un estado emocional debilitado.

Ante esto, seguramente te preguntarás: ¿Qué es aquello que necesito para ser empático? ¿Qué hace falta para lograr la empatía? Ahora lo descubrirás en cada uno de los componentes que conforman el arte de la empatía. Míralos a continuación:

Saber escuchar

Este punto es imprescindible, ya que es más que importante y necesario que prestes atención a todo lo que explica y argumenta la persona afectada, así como comprender bien las expresiones no verbales, es decir, aquellos gestos que pudieras decir mucho más que mil palabras. Aunado a todo esto, evita a toda costa interrumpir la conversación y expresión emocional de esa persona, pues es su momento de liberar toda su carga mediante el habla.

También, es muy valioso que mientras la otra persona está conversando, puedas expresar o realizar algunas señalas que demuestren que estás conectado con sus palabras y realmente existe un feedback comunicativo.

Alguna de estas expresiones pueden ser: observar a la persona fijamente a su cara, asentar con la cabeza de manera moderada, reflejar expresiones faciales acorde a sus palabras, tener un pequeño contacto con sus manos u hombro para enfatizar apoyo, entre otras.

Claro, acentuando el hecho de lo importante que resulta saber escuchar, puedes tener la completa libertad de preguntar algunos detalles sobre lo expresado en la conversación, de manera puntual y sin mostrar otro tipo de intereses inquisitivos, única y especialmente para que la persona sienta que honestamente estás interesado en él.

Interpretar las expresiones

Similar al punto anterior sobre la capacidad de aprender a escuchar, en esta oportunidad la observación es determinante para hacer un buen trabajo con relación a la comprensión de los mensajes que se transmiten de manera no verbal, es decir, que son de carácter paralingüístico, como la entonación, los tiempos de respuesta, el volumen de la voz, entre otros aspectos.

Mostrar comprensión

Para mostrar comprensión es muy acertado hacer uso de buenas palabras que demuestren tal cualidad, tales como: comprendo que actúes o pienses así, entiendo cómo te sientes en estos momentos, la verdad es que hiciste lo correcto después de haber pasado por un mal episodio en tu vida.

Recuerda que no debes invalidar, juzgar, criticar o rechazar cualquier emoción o sentimiento que la persona afectada exprese, realmente no es un momento para eso, pues la sensibilidad es fundamental para evidenciar una completa empatía.

Prestar apoyo emocional

Si es necesario, no solo por lo que escuches sino también por lo que veas, sí es prudente que logres preguntarle a la otra persona si cree conveniente recibir algún tipo de ayuda emocional o directamente profesional. Claro, si luego de su comunicación ya ha podido ventilar tal necesidad, no será necesario preguntar, solo poner manos a la obra para lograr esa ayuda.

Otro dato importante es que, si eres la persona que está dispuesta a escuchar y ya has vivido una situación similar a la de tu interlocutor, el proceso comunicativo será amplia y potencialmente más fluido gracias a la sintonía emocional que se presenta. Además, será muy útil poder expresar qué cosas pudieron ayudar y establecer posibles recomendaciones.

Mostrar solidaridad

Cuando una persona es empática, esta muestra una amplia capacidad de sensibilidad, sobre todo por lo que sientes o padecen el resto de las personas. Por ende, al ser solidarios también somos en gran parte muy empáticos, pues se presenta esa gran necesidad de ayudar al prójimo, aún y cuando no lo conocemos. También tiene relación con el altruismo y la compasión.

Solidaridad en la empatía

¿Por qué actuar con empatía?

Como ya habrás podido leer, la empatía es más que indispensable para fomentar excelentes relaciones sociales y humanas, sin importar la edad o la situación que se esté pasando. Entendiendo que se trata de una habilidad propia de la inteligencia, su práctica es vital para experimentar beneficios, tales como:

  • Aumenta el disfrute de las relaciones sociales con amigos, familiares o compañeros.
  • Comprendes mejor de los estados emocionales del prójimo.
  • Mayor capacidad para influir en los demás.
  • Potencia la capacidad de ayudar o colaborar con los demás.
  • Ayuda a ser más respetuoso.
  • Desarrolla capacidades negociación y liderazgo.
  • Capacidad de altruismo.
  • Interés genuino en los demás.
  • Facilita la solución de conflictos.

¿Cómo cultivar la empatía?

Si has llegado hasta aquí pero crees que necesitas un empuje para lograr demostrar una verdadera empatía, a continuación te diremos algunos aspectos claves para que puedas cultivarla de manera natural y ponerla en práctica, ya que esto te ayudará a ampliar tu manera de comunicarte con el mundo y enriquecerte de nuevas ideas, puntos de vista y oportunidades.

Además, no olvides que se trata de una habilidad social que quizás no todos puedan desarrollarla en su máximo esplendor, y que como ya hemos analizado, es una herramienta ganar-ganar que te permitirá escuchar, comprender y hasta mejorar las preguntas que realizas, puntos esenciales para mantener una excelente comunicación personal. Sin duda, la empatía es una base sólida para la construcción de relaciones ricas y potenciales.

Para lograrlo con éxito, te invitamos a tomar en cuenta estos 3 consejos sencillos que te permitirán mejorar la empatía, si crees ya tenerla, o por el contrario, aprender a cultivarla poco a poco.

Cultivar la empatía

Pregunta para mostrar interés

Al momento de establecer una comunicación, procura realizar algunas preguntas personalizadas y abiertas, como las que te diremos a continuación: ¿Cómo te encuentras? ¿Cómo te has sentido en el trabajo? ¿Qué tal asumes el nuevo proyecto laboral? ¿Has podido disfrutar de lo que haces?

Cada una de las preguntas debe estar enfocada en mostrar cercanía e interés en la otra persona, no lo olvides. Pero, siempre dejando un pequeño espacio para que el interlocutor se pueda expresar ampliamente.

Lee guiones de teatro

Una práctica muy divertida pero con excelentes resultados, es la lectura de los guiones de teatro. Con ellos, te verás en la obligación de centrarte exclusivamente en un personaje, y así podrás analizar lo que se esconde detrás de cada palabra, cuál es la historia personal, las vivencias que experimenta el personaje, cuáles son sus miedos o habilidades, si tiene algunos deseos por cumplir y cómo maneja sus emociones dentro de la novela o dramatización.

Elige a una persona

Esto puedes hacerlo en cualquier situación y sin que nadie se de cuenta, ya que se trata de un ejercicio completamente orgánico. Una vez que escojas cuál puede ser tu persona objetivo, intenta conocer qué es lo que quiere expresar esa persona, pero únicamente a través de sus emociones y pensamientos. Es decir, mediante una comunicación expresiva.

En este sentido, debes estar atento a lo que hace y cómo lo hace. Para ello, puedes escoger a individuos que frecuentes en el transporte público, caminando por la calle, en una cafetería o un lugar abierto, ya que son plataformas donde puedes encontrar a muchas personas con diversidad de situaciones y vivencias escondidas en su ser.

¿Se nace con empatía?

Aunque se crea que realmente nacemos con la habilidad de ser empáticos, realmente se trata de una herramienta que se forma a través de un correcto desarrollo social y emocional desde que somos bebés. Por ende, es comprensible determinar que algunas personas les cueste mucho más llegar o demostrar algún nivel de empatía, pues no se criaron en las condiciones más favorables para ello.

Desde el punto de vista de la psicología, el fundamento de la empatía se adjudica a las neuronas espejo, las cuales se ubican en el cerebro de los seres humanos y primates, capaces de captar e imitar los estados emocionales y anímicos de las personas que nos rodean. Obteniendo ese primer punto, luego debe combinarse tal capacidad con la socialización, pues de esta manera se logra la empatía deseada.

En este sentido, la educación emocional de los representantes y padres es indispensable para que un bebé logre desarrollar empatía, y que además logre mantenerla con el paso de los años. Por ejemplo, cuando a un niño le son ignorados los sentimientos, honestamente solo aprenderá a ignorar sus propios sentimientos y los del resto.

En el caso contrario, cuando a un niño se le presta la debida atención emocional, es decir que, se le escucha, se le brinda amor mediante caricias y besos, sin duda alguna aprenderá a captar mejor sus emociones internas, pero también las de la otra persona; dando pasos a un futuro con una completo desarrollo de la empatía.

Para entenderlo mejor, se trata de una habilidad social realmente importante, no solo para quién la posee y la practica, sino también para todas las personas que se relacionan entre sí, ya sea en el ámbito personal, profesional y hasta familiar.

¿Cómo saber si una persona tiene empatía?

Para saber si una persona es empática es necesario que muestre este tipo de características esenciales:

Sensibilidad

Los empáticos son sumamente generosos, abiertos y grandes oyentes. Si deseas un amor sentimental de esos reales, una persona empática será clave. Además, mucho se cometa sobre que, los empáticos son muy sensibles y algunas veces requieren de tiempo para curarse emocionalmente si los hacen sentir mal.

Emocionales

Una persona verdaderamente empática logra una completa sintonía con los estados de ánimo de otras personas, ya sean negativos o positivos, pues logran percibirlo todo.

Introvertidos

Suelen ser introvertidos y prefieren el contacto directo o también asociarse con grupos pequeños. Y en caso de no ser tan extrovertido, posiblemente decida tomar distancia de las aglomeraciones.

Intuitivos

Perciben con mayor facilidad los sentimientos de las personas. Además, eso también permite que la persona empática logre descubrir la calidad de las relaciones que mantiene, alejándose así de las energías malas que lo rodeen. Evitan a toda costa las personas que puedan aprovecharse en este sentido.

Intimidad

Las personas más empáticas piensan que estar cerca de ciertas personas puede llegar a resultar ser algo agotador, por lo que normalmente tienen esa necesidad de estar más tiempo a solas, con la intención de incrementar su energía. Esto es algo que les puede llevar incluso a la soledad o parecer solitarios, pero es una necesidad que tienen de aislarse un poco.

Persona con empatia

Pocas relaciones íntimas

Por creer que serán pisoteados o por el temor de perder su intimidad, suelen rechazar o evitar las relaciones extensas. Generalmente se sienten más cómodas en las relaciones que ya conocen, posteriormente es cuando consideran la posibilidad de formar una relación de pareja.

Conexión con la naturaleza

El medio ambiente es de gran ayuda para disfrutar de la naturaleza, divisando paisajes, el océano y otros espacios agradables, donde se logra percibir con muy buena actitud los sonidos, olores y texturas propias de la naturaleza.

Disponen de un gran corazón

Esto se ve claramente reflejando cuando buscan saciar esa necesidad de tranquilizar el dolor de los demás, sobre todo aquellos que se encuentran más afligidos. Pero no solo de manera superficial, realmente experimentan los sentimientos y emociones de ese otro individuo que la esté pasando mal. Sin embargo, suelen ayudar con más tacto a las personas que ya conocen con anterioridad. aunque siempre hay un punto de altruismo, procurando ayudar a cualquier persona que lo necesite, ya que realmente les importa el dolor y sufrimiento de otras personas.

Curiosidad

Aunque es una cualidad que pareciera ser sólo de los niños, realmente las personas llenas de empatía también suelen ser extremadamente curiosos, sobre todo al momento de realizar preguntas, sin que esto afecte el espacio personal del otro individuo, ya que no es nada recomendable enfrentarse a un desconocido donde no existe ningún vínculo de confianza. Este tipo de personas, las empáticas, se dejan llevar por la curiosidad que suelen sentir por los hábitos, las prácticas y el conocimiento que posee la otra persona.

Opiniones a prueba

Esto quiere decir que no se quedan anclados en un aspecto de su vida o en el de la otra persona, las personas que disponen de empatía en su haber tratan de escuchar y preguntar para cambiar su forma de pensar. Van pasando página, lo cual no significa que no les afecte, simplemente que se preparan para seguir avanzando con sus vidas.

¿Hay desventajas al tener demasiada empatía?

Todos los excesos acaban siendo malos, y en el caso de la empatía no hay ninguna excepción. Por ende, cuando se trata de una persona que cuenta con una empatía excesiva, esto puede desencadenar en un abandona propio y personal, o peor aún, emplear tales sentimientos para manipular.

Cabe resaltar que, los límites entre quién soy y quiénes son los demás en una persona llena de empatía excesiva son ampliamente cercanos, es decir, son limitantes difíciles de percibir así como así. Esto sin duda genera una serie de dificultados y desventajas que pueden perjudicar al individuo con el pasar de los años; tales como:

  • Autosacrificio.
  • Incapacidad para poner límites.
  • Dificultad para distinguir entre los sentimientos propios y ajenos.
  • Tendencia a dejar de lado el juicio crítico y reflexivo.
  • Agotamiento mental y emocional.
  • Excesiva implicación en los asuntos de los demás.

También te podría interesar...