Pensamientos positivos: características y beneficios

Pensamientos positivos

El pensamiento positivo es aquello que nos permite ser optimistas y mantener una calidad de pensamientos en sintonía con lo positivo, no solo en el ámbito personal, sino también en el profesional. Ahora, ¿qué beneficios tienen los pensamientos positivos? ¿Cuáles son sus características? ¿Cómo identificar a una persona con pensamientos positivos?

Para responder a estas y otras interrogantes sobre el tema, no dejes de leer hasta el final y tomar nota de lo que será de gran ayuda para lograr lo que deseas, trabajar por lo que sueñas y mantener la correcta actitud sin verte en la necesidad de rendirte.

Índice
  1. ¿Por qué es difícil tener pensamientos positivos?
    1. Beneficios de los pensamientos positivos
    2. Características de una persona con pensamientos positivos
  2. ¿Qué hacer para tener pensamientos positivos?
    1. Cambiar o modificar el lenguaje
    2. Enfocarse en el presente
    3. Realizar una actividad física o deporte
    4. Capacidad de resiliencia
    5. Evita compañías tóxicas
  3. ¿Cómo concentrarse en tener pensamientos positivos?
    1. Identificar lo que debes cambiar
    2. Controlar los pensamientos
    3. Ten sentido del humor
    4. Estilo de vida saludable
    5. Conversar contigo mismo o disfrutar de la soledad
    6. Repetir frases positivas
    7. Ejemplos de pensamientos positivos
  4. ¿Cómo evitar los pensamientos negativos?
    1. Evita un mal lenguaje corporal
    2. Habla sobre lo que te preocupa
    3. Vacía la mente cada vez que puedas
    4. Visualiza un panorama con una perspectiva general
    5. Potenciar la creatividad
    6. Realiza un paseo o viaje
    7. Enumera lo que sea bueno

¿Por qué es difícil tener pensamientos positivos?

Claro, de antemano te adelantamos que no se trata de una tarea fácil, ya que está médicamente comprobado que el ser humano dispone de más de 50 mil pensamientos al día, de los cuales en su mayoría, son negativos o con vinculación al pasado.

Además, el día a día y la rutina, así como la sociedad puede llevarnos a sostener la negatividad como algo normal. Pero al contar con una joya en nuestro organismo como es el cerebro, es posible que el ser humano pueda modificar tal situación y disfrutar de otro tipo de pensamientos.

Dificultad de pensamientos positivos

Para ello, se requiere de constancia y esfuerzo, como cualquier otro hábito, para lograrlo con éxito. Y sin duda, resulta necesario, pues son muchos los beneficios que se obtienen cuando los pensamientos positivos toman protagonismo en la vida de las personas.

Beneficios de los pensamientos positivos

Como cualquier hábito, pensar en positivo requiere de esfuerzo y constancia, pero la recompensa merece la pena. Ser optimista mejora la salud, reduce los niveles de estrés y facilita la consecución de objetivos, lo que en consecuencia contribuye a ser más felices. Y si tú te encuentras bien, los que están a tu alrededor se encontrarán mejor.

Desde el punto de vista psicológico, el tener pensamientos positivos repercute notablemente en los niveles de estrés, ansiedad y frustración; lo que significa que, gracias a tales pensamientos se puede disfrutar de una buena salud. Pero para tener una visión más clara, presta atención al siguiente listado de beneficios de los pensamientos positivos:

  • Aumenta la expectativa de vida.
  • Disminución de los estados de depresión.
  • Menores experiencias de sufrimiento.
  • Resistencia al virus o refriados leves.
  • Mejor bienestar tanto físico como mental.
  • Calidad en la salud cardiovascular.
  • Capacidad para afrontar situaciones difíciles.
  • Reducción del estrés, ansiedad y frustración.

Sin duda alguna, son beneficios valiosos los que se experimentan al contar con pensamientos positivos, puesto que no solo evita problemas físicos, sino también mentales. Además, tal positivismo también es capaz de mantener una actitud y personalidad adecuada ante situaciones que parecieran ser imposible.

Características de una persona con pensamientos positivos

No cae en confusiones

Esto quiere decir que, la persona con pensamientos positivos tiene una clara línea entre renunciar y dejarlo ir, por lo que no se aferra fácilmente a ideas o creencias que no son de utilidad ni saludables para su optimismo personal.

Hace que las cosas pasen

La persona con pensamientos positivos no espera tener un buen día, sino que actúa en concordancia para que todo salga bien, se involucra en cada proceso y busca los cambios necesarios ante las situaciones difíciles.

No se aferra al pasado

Lo que pasó se queda en el pasado, por lo que no se centra en vivir de ello. Y en caso de presentarse episodios de negatividad, los emplea como un trampolín para proyectarse a un mejor futuro.

Agradece las cosas que suceden

Aunque pudieran sucedes cosas malas, la persona positiva con relación a sus pensamientos, únicamente se centra en los beneficios que recibe durante el día y los agradece. Esto le permite visualizar lo bueno y no lo malo.

No se detiene por limitaciones

Abre su mente, ante las posibilidades y oportunidades que se le presenten o pueda encontrar, lo que se traduce a una correcta motivación para seguir adelante. Claro, reconoce que no existe una solución ideal o perfecta, pero sí otras factibles.

Los temores o miedos no interfieren

Ante la capacidad de conocer o experimentar nuevas cosas, la persona con pensamientos positivos no se detiene por temores o miedos que le puedan limitar o impedir esas experiencias nuevas por vivir.

Los miedos no interfieren

Sonríe constantemente

Es una de las características más visibles de una persona positiva, que aunque igualmente enfrente momentos tristes o difíciles, la sonrisa está mayormente presente en sus días. Y lo mejor de todo, es que suele contagiar a los que le rodean.

Comunica correctamente las ideas

La comunicación correcta es la única manera de conectarse con el resto de las personas, incluso con las ideas positivas, así que por excelencia son personas comunicativas.

Experimenta emociones

Aunque no siempre signifique que debe estar feliz, la persona positiva está abierta para experimentar una gran variedad de emociones y hasta sentimientos, como la tristeza o el enfado, todo ello esencial para poder ser empático.

Asume responsabilidades y no se victimiza

Lo que quiere decir que no busca culpabilizar a otros por algo que ha hecho, o hacer un papel de víctima cuando no le corresponde. Todo lo contrario, busca ayudar y apoyar al resto de las personas.

¿Qué hacer para tener pensamientos positivos?

Cambiar o modificar el lenguaje

La manera en cómo nos comunicamos dice mucho de lo que pensamos, así que las palabras que empleamos para dicha comunicación son de gran importancia para fomentar un pensamiento positivo de calidad.

Por ello, cuando escuchas varias veces un mensaje, éste podría convertirse en algo cierto para ti. Así que es importante que logres reducir algunas palabras o expresiones que más bien caen en negatividad o limitaciones. Como por ejemplo: nunca podré hacerlo, si hubiera hecho aquello, jamás lograré; también aquellas frases que le anteceden la palabra no.

Enfocarse en el presente

Adelantarse al presente solo trae ansiedad y algunas veces frustración, por lo que es mejor vivir del presente e invertir el tiempo en cosas que realmente potencien aquellos que vives ahora. Todo ello con el fin de no darle cabida a los pensamientos negativos que logran un efecto dañino en todo el organismo.

Realizar una actividad física o deporte

Es muy conocido el poder que tiene la realización de una actividad física en la salud y bienestar de las personas, pues la liberación de endorfinas, así como el efecto analgésico, son necesarios para disfrutar de esa felicidad post-entrenamiento y hasta de diversión.

Capacidad de resiliencia

No solo puede, sino que se siente a gusto al sobreponerse a los problemas, dificultados o momentos difíciles. Lo que quiere decir que no se detiene a pensar en el por qué las cosas le suceden a él, sino que se enfoca en conocer qué cosas puede aprender de dicha situación compleja.

Capacidad de resiliencia

Evita compañías tóxicas

No es un secreto para nadie que las malas actitudes se contagian, así como las buenas. Por ello, si deseas mantener los pensamientos positivos, lo mejor será rodearte de personas que también conecten con lo mismo y busquen sacar lo mejor de ti.

¿Cómo concentrarse en tener pensamientos positivos?

Sí es posible transformar los pensamientos negativos a pensamientos positivos, y aunque se crea que es un proceso complicado, realmente solo se necesita de práctica y paciencia para fomentar el hábito. ¿Cómo hacerlo? A continuación te lo diremos paso a paso.

Identificar lo que debes cambiar

Para que logres ser mucho más optimista y disfrutar de pensamientos positivos, lo primero que debes hacer es identificar esas situaciones o momentos en los que se presentan esos pensamientos negativos, y poco a poco ir abordando casa situación de una manera positiva.

Controlar los pensamientos

Evalúa cada cosa que piensas de una manera objetiva, y cuando sientas que los pensamientos son negativos, enfócate en darles un correcto giro para que se transformen en pensamientos positivos.

Ten sentido del humor

Aunque siempre hay momentos para ser serios, no le tengas miedo a los buenos momentos de risas, sobre todo en situaciones donde el estrés o la ansiedad se hacen presentes. El humor es una herramienta ideal para activar el positivismo.

Estilo de vida saludable

Más allá de ejercitarte, la alimentación también te aportará muchos beneficios en cuanto la actitud positiva, pensamientos sanos y estimulación correcta de la mente.

Conversar contigo mismo o disfrutar de la soledad

Siempre será necesario tener con quién hablar, pero las conversaciones personales invitan a reflexionar y meditar en los cambios que debes hacer, por lo que resultará beneficioso. También son de utilidad para darte ánimo y medir las cosas que estás haciendo bien. Sea que te mires al espejo, te tomes un café o mientras observas el atardecer, la soledad es una excelente compañía para expandir pensamientos positivos.

Repetir frases positivas

No puedes convertirte en una persona optimista de un día para otro, pero si practicas y repites algunas frases positivas durante el día, podrás enviarle un mensaje al cerebro de que las cosas están cambiando, por lo que tendrás más aceptación contigo mismo y las críticas no serán tan fuertes.

Ejemplos de pensamientos positivos

  • Existe una manera de hacer que las cosas funcionen

Ciertamente a veces las cosas no suceden como una quisiera, otras veces es necesario realizar algo más de una vez para que pueda funcionar. Lo cierto es que, de una u otra forma, no existe una solución sino muchas. Una vez que la encuentres, podrás optimizar tu manera de hacer y ver las cosas con nuevas estrategias que no se detengan por obstáculos físicos, ni mucho menos mentales.

  • Hay mucho por lo qué agradecer

Antes de pensar en aquello que no se logró o no se pudo, nada mejor que pensar en aquello que sí llegó, aquello que resultó positivo y satisfactorio para ti. Al enfocarte en lo beneficioso que recibes y agradecer, verás con mucha más claridad todo lo que has logrado y lo poco que te falta por alcanzar aquello que deseas.

  • Hay más oportunidades para intentarlo

Las oportunidades a veces solo se presentan dos veces, o quizás más. Pero el hecho es que siempre están allí esperando que las tomes o que decidas actuar; pues sea como sea tienes la facilidad de vivir otra experiencia gracias a que puedes contar con una nueva oportunidad para hacer lo que te propongas.

  • Compromiso con los resultados obtenidos

Aún y cuando no veas los resultados de inmediato, es importante que no pierdas esa necesidad de compromiso que todo gran o pequeño proyecto necesita, ya que fijarte en la meta y no en el proceso, permitirá que alcances todo lo que deseas de la mejor manera y positivamente.

  • Aprender de los fracasos y caídas

Sin las malas experiencias no existiera aprendizaje, por lo que el fracaso es necesario para afrontar un éxito total de alguna situación, pues el fracaso es lo que te permitirá superar una caída durante todo el recorrido que debas caminar para lograrlo. Por ello, no importa que tan grande sea el fracaso o la frustración, levantarse y actuar es el mejor remedio para mantener los pensamientos positivos.

¿Cómo evitar los pensamientos negativos?

Evita un mal lenguaje corporal

Si prestas atención al lenguaje corporal, que es todo aquello que podrías estar comunicando con tu rostro, manos y postura; notarás que quizás hay algo de negatividad en ello. Como por ejemplo, fruncir el ceño, encorvarte o cruzar los brazos. Si es así, un mal lenguaje corporal podría impedir que los pensamientos positivos se proyecten en ti, y solo darle paso a una baja autoestima y poca confianza.

Habla sobre lo que te preocupa

En la mayoría de los casos los pensamientos negativos van de la mano con problemas o situaciones emocionales que afectan a todo el organismo, y que se mantienen allí porque no han logrado salir a través de la comunicación. Por ende se recomienda hablar con un buen amigo que escuche para no guardarse las cosas.

Vacía la mente cada vez que puedas

Vaciar la mente

El cerebro no para de trabajar aún y cuando estás dormido, lo que quiere decir que siempre está en constante movimiento. Así que no resulta fácil dominar los pensamientos negativos que van de un lugar a otro como a mil kilómetros por hora, pero si te tomas el tiempo de vacía y desechar lo negativo a través de la meditación, reflexión y hasta la oración, podrás tener mejor resultados. Será como una especie de reinicio para el organismo en general.

Visualiza un panorama con una perspectiva general

Algunas veces, cuando piensas en negativo puede que se deba a una perspectiva errónea de la situación. Así que, el consejo es visualizar todo el panorama, todos los detalles que te rodean y determinar si realmente es tan grave como crees, si puede encontrarse una solución o si alguien podría brindarte una ayuda.

Potenciar la creatividad

Una manera de ahuyentar los pensamientos negativos es a través de la creatividad, ya que resulta bastante útil para incluso despejar la mente de lo que te agobia. Alguna de las cosas que puedes hacer son las siguientes: pintar o dibujar algo, escribir un poema, armar un rompecabezas, descifrar alguna adivinanzas, entre otras.

Cada actividad que realices de la mano con la creatividad, funcionará como una especie de terapia que activará el estado de ánimo de manera positiva y mentalmente te liberará de aquellas cosas que no te permiten avanzar.

Realiza un paseo o viaje

Aunque los pensamientos, tanto positivos como negativos están en la mente, la verdad es que se producen prácticamente a raíz de todo lo que nos rodea, las experiencias, compañías y situaciones. Por ello, nada mejor que realizar un paseo para disfrutar de nuevas cosas, así como estar con personas positivas que influyan en ese despeje de los pensamientos.

Enumera lo que sea bueno

La rutina diaria casi siempre terminan apoderándose de todo, tanto así que olvidamos lo bueno que tenemos y perdemos el enfoque de lo que realmente vale la pena; así que muchas veces no estás del todo deprimido o con pensamientos negativos, sino más bien distraído.

Para no caer en eso, resulta bastante positivo que puedas enumerar en tu mente o una libreta, cuáles son esas cosas que valen la pena que tienes a tu alrededor, así como qué cosas buenas te han acontecido en tu día de trabajo o escuela.

No queda duda que los pensamientos positivos tienen un poder inigualable en el comportamiento y desarrollo de las personas, por lo que no debe ignorarse su importancia, ni mucho menos la capacidad que tenemos para desarrollar cada vez más pensamientos positivos, que son aquellos que edifican, educan, corrigen y estiman.

Recuerda que no se trata de una tarea tan difícil, pero se requiere de esfuerzo y constancia para lograrlo; pues los mejores cambios siempre tardan un poco más. Así que empieza desde hoy, agradeciendo lo bueno, buscando soluciones y alternativas para cambiar, reuniéndote con personas positivas, y lo mejor de todo; sonriendo de verdad.

También te podría interesar...