Infección de orina por escherichia coli

Infección de orina por escherichia coli

La presencia de escherichia coli en el organismo es algo normal. Es una bacteria que se aloja en el intestino e interviene en el proceso de descomposición de alimentos y favorece la asimilación de ciertas vitaminas. Sin embargo, cuando este microorganismo se aloja en otras partes del cuerpo es posible que cause complicaciones de salud.

Una de las infecciones más comunes provocada por la e. coli es a nivel urinario. Si bien puede afectar a casi cualquier persona, las mujeres suelen ser la población de mayor incidencia. Y, aunque en la mayoría de los casos no suele ser grave, si no es tratada a tiempo puede llegar a afectar el funcionamiento de los riñones.

Índice
  1. ¿Qué es la escherichia coli?
  2. Infección de orina por escherichia coli
  3. Síntomas de la infección
  4. Causas de infección por e. coli
  5. Diagnóstico
  6. Factores de riesgo
  7. Tratamiento
  8. E. coli resistente a antibióticos
  9. ¿Cómo prevenir la infección?

¿Qué es la escherichia coli?

La escherichia coli, también conocida bajo el nombre de e. coli, es una bacteria que se encuentra alojada en el intestino tanto de personas como de animales. Su presencia en el organismo suele ser inofensiva en la mayoría de los casos, pudiendo llegar a producir diarrea leve.

Escherichia coli

Se trata de un microorganismo de gran ayuda para el funcionamiento del organismo. Su permanencia en el tracto intestinal ayuda a que sea posible descomponer y digerir los alimentos que consumimos. Sin embargo, algunas cepas de esta bacteria pueden llegar a producir ciertos problemas de salud si se alojan en otras zonas como la orina o la sangre. Y de la misma manera es posible que si se alojan otros tipos de e. coli en el intestino se produzcan algunas molestias.

Por lo general, la persona puede presentar molestias a nivel estomacal como dolor de estómago, retortijones y cólicos abdominales. También se observa la presencia de diarrea que destaca por tener sangre. E igualmente la persona puede padecer vómitos. Si bien parece un cuadro complicado, suele resolverse con tratamiento en tan solo una semana. Esto siempre y cuando se trate de una persona sana.

Infección de orina por escherichia coli

Existe variedad de infecciones causadas por la bacteria escherichia coli. Sin embargo, suele ser bastante común que se presente infección urinaria, siendo la de mayor ocurrencia sobre todo en las mujeres. Si bien se habla de que es posible que este microorganismo se aloje en otras partes del cuerpo al consumir agua o alimentos contaminados, en el caso de la infección de orina es a través de las heces.

La razón de que la población femenina sea mayormente afectada es que la uretra y el recto se encuentran muy cerca, facilitando su acceso. Por lo general primero se traslada a la vagina y de allí llega a la uretra para luego alojarse en la vejiga. Una vez allí, se adhiere en las paredes permitiendo colonizarlo. A medida que prolifera este microorganismo en este órgano, produce inflamación del mismo además de causar dolor.

Las molestias causadas por esta bacteria varían dependiendo de la zona en que se encuentre alojada. Cuando solo afecta las vías urinarias bajas, la persona puede presentar dolor y molestias al orinar. Mientras que, si se encuentra afectando las vías urinarias altas se puede llegar a presentar también fiebre alta y dolor lumbar. Además, la misma puede provocar cistitis de manera recurrente.

A diferencia de otros microorganismos, la escherichia coli no se puede expulsar a través de la orina. Esto se debe a que dispone de un sistema de agarre que le permite fijarse fuertemente a la vejiga.

Se debe tener en cuenta que esta infección suele ser de mayor frecuencia cuando existe poca higiene de la zona urogenital así como del ano. Además, es posible que se llegue a contagiar durante el acto sexual por esta misma causa. Si no se trata a tiempo, es posible que se provoque daño renal.

Síntomas de la infección

No existe una cepa específica de e. coli que produzca infección de orina. Todas, una vez que ingresan al tracto urinario y a la vejiga, proliferan y desencadenan el cuadro clínico. Al existir una variedad de tipos, la sintomatología puede variar, siendo más comunes:

  • Ganas de orinar recurrentes. Esta sensación puede presentarse aun cuando no haya orina.
  • Ardor durante la micción.
  • Orina con apariencia turbia y mal olor.
  • Puede aparecer sangre en la orina.
  • Fatiga, cansancio y debilidad.
  • Diarrea.
  • Vómito y náuseas.
  • En las mujeres se presenta dolor pélvico, mientras que en los hombres aparece dolor rectal.
  • Piel pálida.
  • Fiebre.
  • Dolor lumbar, abdominal y en las caderas.
  • Pérdida del apetito.
  • En algunos casos pueden llegar a aparecer moretones sin causa aparente.
  • Orinar de manera frecuente pero en pequeñas cantidades.

Causas de infección por e. coli

Las razones por las que se produce son pocas y fáciles de determinar. En primer lugar se tiene que la anatomía de la mujer facilita la infección por esta bacteria. Al estar la uretra muy cerca del ano, los microorganismos se trasladan fácilmente hacia esta zona permitiendo su acceso a las vías urinarias. Además, al estar la uretra muy cerca de la vejiga también hace más fácil que estas accedan a esta zona.

Infección de orina por escherichia coli causas y cómo tratarla

La poca o mala higiene también permite que proliferen más rápido la aparición de bacterias más allá del tracto intestinal. Y, aunque no es algo recurrente, es posible que a través del contacto sexual pueda acceder la escherichia coli a la uretra.

Diagnóstico

Para poder indicar el tratamiento más adecuado para la infección de orina causada por e.coli, se hace necesario solicitar pruebas de laboratorio que permitan evidenciar mejor si realmente esta bacteria es la causante del cuadro clínico. En este sentido, el médico tratante puede solicitar dos pruebas:

  • Urocultivo: se trata de un examen de laboratorio que permite identificar si existe o no proliferación de microorganismos en la orina. Se deberá tomar una muestra del fluido, el cual se utilizará para realizar un crecimiento controlado donde se podrá evidenciar si existe crecimiento de la bacteria o no.
  • Antibiograma: suele solicitarse cuando el urocultivo ha salido positivo. A través de este es posible determinar cuáles son los antibióticos efectivos para eliminar la bacteria y tratar la infección, además de comprobar si existe resistencia a algún fármaco.

Factores de riesgo

Por lo general hablamos de un tipo de infección que se puede tratar fácilmente. Además, puede presentar en cualquier persona, aunque existen ciertos factores que aumentan la incidencia en ciertas poblaciones:

  • Edad: niños y adultos mayores tienden a padecer con mayore recurrencia infección por e.coli. Además, debido a esto también suelen desarrollarla con mayor gravedad si no se trata adecuadamente.
  • Sistema inmune debilitado: suelen verse cuadros complicados cuando el sistema inmune no trabaja de manera correcta. Esto suele ser común en personas que padecen de SIDA o se encuentran bajo tratamiento con medicamentos para el cáncer o para la prevención de trasplante de órganos.
  • Mujeres: debido a que la uretra y el ano se encuentran más cercanos, facilita el acceso de la bacteria a las vías urinarias.

Tratamiento

Al tratarse de una bacteria, el tratamiento más adecuado es el uso de antibióticos ya que son fármacos diseñados para combatir la presencia de estos microorganismos. La manera en que se administran es por vía oral o endovenosa dependiendo del caso.

E coli

Sin embargo, en la actualidad este tratamiento puede efectuarse acompañado de alternativas naturales. En este sentido, los médicos pueden llegar a recomendar el consumo de extracto de arándano rojo americano. Ya que contiene ciertos flavonoides que dificultan la adhesión de la escherichia coli a las paredes de la vejiga lo cual permite que pueda ser expulsada a través de la orina.

E. coli resistente a antibióticos

En la actualidad se han registrado casos donde la bacteria es resistente a la acción de los antibióticos. Esto se debe a que muchas personas abusan del uso de estos medicamentos, lo cual hace que la e.coli pueda sobrevivir aunque se aplique tratamiento.

Además, se sabe que los granjeros suelen usar antibióticos para la cría de pollos y ganado. Esto aumenta el riesgo de que se produzca resistencia a la escherichia coli en estos animales. Por lo que, si una persona consume carne de este tipo contaminada entonces es posible que la bacteria resistente se aloje en el intestino y luego pueda pasar al sistema urinario, dificultando el tratamiento de la infección.

¿Cómo prevenir la infección?

Si bien se trata de una infección que puede provocar graves complicaciones, evitar que la bacteria ingrese al tracto urinario puede ser posible aplicando medidas adecuadas. En primer lugar se sabe que la forma de contagio más frecuente es a través de las heces, por lo que la higiene de la zona urogenital y el ano es indispensable para evitar el acceso de e. coli al sistema urinario.

Se recomienda que en las mujeres, a la hora de limpiarse tras ir al baño, sea de adelante hacia atrás. Esto evita que partículas de heces lleguen hasta la uretra. También se hace necesario tener una buena higiene de las manos, sobre todo antes de comer o manipular alimentos.

También te podría interesar...