Gonorrea: causas, síntomas y tratamiento

Gonorrea causas síntomas y tratamiento

La gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual (ETS) producto de una bacteria, logrando contagiarse a través del contacto sexual. Se considera una de las enfermedades de índole sexual más común, la cual afecta en su mayoría a personas jóvenes, observándose mayormente en las edades de 15 a 30 años.

A pesar de generar muchas molestias, se trata fácilmente con un tratamiento a base de antibióticos. Sin embargo, cada vez son más las cepas resistentes a estos fármacos. Y, si bien tiene un buen pronóstico, al no presentar síntomas en su fase inicial, es difícil lograr detectarla en esta etapa. 

Índice
  1. Causas de la gonorrea
  2. Síntomas de la gonorrea
  3. Factores de riesgo
  4. Diagnóstico de la gonorrea
  5. Tratamiento de la gonorrea
  6. Posibles complicaciones de la gonorrea
  7. Medidas para prevenir la gonorrea

Causas de la gonorrea

Esta enfermedad de transmisión sexual es causada por una bacteria denominada neisseria gonorrhoeae. La manera en que se produce su contagio es a través del contacto sexual sin ninguna medida de protección. Es así como es posible que una persona se infecte si mantiene relaciones sexuales de manera genital, anal u oral. 

Gonorrea

Aún así, su transmisión es posible que se produzca cuando existe contacto con los ojos. Esto se debe a que la bacteria habita en las mucosas del cuerpo, facilitando su proliferación. Sin embargo, suele ser más común que se aloje en la uretra, la garganta y el recto. Además, puede llegar a afectar el cuello del útero.

Los bebés también pueden llegar a infectarse durante el parto cuando atraviesan el canal vaginal. Y es frecuente que los síntomas se observen en los ojos.

Aunque la eyaculación es un medio de contagio de esta enfermedad, la realidad es que no es necesario que esto ocurra para que se produzca la infección. De por sí solo basta que haya contacto con los genitales, el ano o la boca de la persona infectada para que se produzca el contagio.

La probabilidad de que una persona contraiga esta enfermedad aumenta cuando se mantienen encuentros sexuales con diferentes personas. Y es aún más común cuando la pareja sexual tiene antecedentes en enfermedades de transmisión sexual. Además, el riesgo es mayor cuando no se utiliza preservativo, se mantienen prácticas sexuales poco seguras o existe un alto consumo de bebidas alcohólicas o drogas. Aún así, esta enfermedad afecta por igual tanto a hombres como mujeres.

Para que se transmita, solo basta que entren en contacto los fluidos corporales como el semen, el líquido preseminal o los flujos vaginales. Además, no es necesario que el pene entre completamente en la boca, ano o vagina para que se produzca el contagio.

Síntomas de la gonorrea

Uno de los mayores inconvenientes con la gonorrea es que suele ser una enfermedad asintomática. Se estima que la mayoría de las personas ignoran que se encuentran infectadas. En promedio se calcula que cuatro de cada cinco mujeres desconoce el diagnóstico, mientras que en los hombres es uno de cada. Esto impide que se aplique el tratamiento de manera oportuna, lo cual aumenta la probabilidad de que el cuadro clínico se complique.

En los casos en que se presentan síntomas en la fase inicial de la infección, estos aparecen de 2 a 5 días tras el contagio. En los hombres es posible que aparezcan signos de la enfermedad un mes después de haberse contagiado.

 Esto provoca que se aumente el riesgo de complicaciones, motivo por el que es tan importante someterse a todas las revisiones ginecológicas periódicas.

Cuando sí aparecen, los síntomas de la gonorrea en mujeres pueden englobar los siguientes:

  • Molestia, dolor o ardor al orinar.
  • Dolor al mantener relaciones sexuales.
  • Sensación de querer orinar con más frecuencia.
  • Aumento del flujo vaginal, presentándose de color amarillento verdoso y con mal olor.
  • Sangrados vaginales entre periodos, sobre todo tras haber mantenido relaciones sexuales.
  • Dolor en la parte inferior del abdomen. Este síntoma suele aparecer en casos donde existe infección en las trompas de Falopio o cuando se ha extendido al estómago.
  • Ciclos menstruales irregulares.

Síntomas de la gonorrea

En el caso de los hombres, los síntomas de la gonorrea pueden incluir:

  • Secreciones anormales del pene, de color blanco, amarillo o verde.
  • Dolor o ardor al orinar.
  • Ganas de orinar con más frecuencia de lo habitual.
  • Sensibilidad o inflamación de los testículos.
  • Uretra roja o inflamada.

Tanto en mujeres como en hombres cuando la infección afecta a la garganta, se presenta dolor en esta zona. Esto puede acompañarse de picazón constante y dificultad para tragar. En muchos casos puede confundirse con una amigdalitis.

En el caso de que la bacteria esté presente en el recto es posible que se observe secreciones anormales así como sangrado. Además, puede aparecer dolor cuando se defeca. También es posible que se sienta constante picazón en el ano. A nivel intestinal la persona puede presentar molestias dolorosas cuando se producen los movimientos del intestino.

Cuando la gonorrea ha afectado los ojos la persona puede llegar a presentar sensibilidad a la luz así como dolor ocular. Otro de los síntomas es la aparición de secreciones en los ojos. Puede ser en uno o en ambos.

Existen casos donde la bacteria se aloja en las articulaciones se produce la artritis séptica, produciendo molestias similares a la artritis reumatoide. Por lo general se observará enrojecimiento e hinchazón de la articulación además de dolor, sobre todo cuando se realizan movimientos.

Factores de riesgo

Toda persona activa sexual se encuentra en riesgo de contraer gonorrea cuando no hace uso del preservativo en sus encuentros sexuales con una persona infectada. Se estima que las mujeres menores de 25 años son la población más propensa a padecer esta enfermedad. Y de la misma manera sucede con los hombres homosexuales. Además de estas situaciones, existe mayor riesgo de contagio en los siguientes casos:

  • Se inicia una relación con una nueva pareja.
  • Tener contacto sexual con una persona que tiene otras parejas sexuales.
  • Mantener relaciones con diferentes personas.
  • Tener antecedentes de enfermedades de transmisión sexual.

Diagnóstico de la gonorrea

El diagnóstico médico de la gonorrea se lleva a cabo mediante el análisis de las secreciones de la uretra, el útero, el ano o la garganta. También puede ser necesario tomar una muestra de las células del cuello del útero, la vagina o el pene. Para la recolección de muestras se utiliza un hisopo para luego sean examinadas en el laboratorio a través de un microscopio con el fin de visualizar las bacterias responsables de la infección. Esto se hace a través de la tinción de Gram, aunque no se considera el método más seguro.

Diagnóstico de gonorrea

Para obtener resultados más fiables, se recomiendan exámenes de ADN mediante la prueba de reacción de cadena polimerasa o la reacción en cadena ligasa. Son exámenes rápidos y pueden ser realizados con una muestra de orina, siendo más sencilla su recolección.

No es necesario que se presenten síntomas para realizar este tipo de pruebas de laboratorio. Por lo general, el médico tratante lo solicitará si la persona pertenece a la población de riesgo, sobre todo las mujeres menores de 25 años que son sexualmente activas..

Tratamiento de la gonorrea

Al ser una infección de carácter bacteriano, la gonorrea se cura mediante el uso de fármacos antibióticos. El médico indicará cuál es el más adecuado para cada caso en particular teniendo en cuenta el alcance de la infección y la gravedad de los síntomas.

Por lo general, se suele recomendar una única dosis de antibióticos tomada en pastillas durante una semana o, en su defecto, inyectada en un músculo. No obstante, hay determinadas infecciones por gonorrea que son resistentes a algunos antibióticos, por lo que es posible que sea necesaria la administración de más de una dosis.

Además, con frecuencia las personas infectadas por gonorrea deben también recibir tratamiento para la clamidia, ya que se suelen presentar las dos infecciones al mismo tiempo.

Cuando se está recibiendo tratamiento para la gonorrea, es importante tener en cuenta recomendaciones como las siguientes:

  • No automedicarse y tomar todos los fármacos recetados por el médico, aún cuando los síntomas hayan desaparecido, ya que la infección podría permanecer todavía en el cuerpo.
  • La pareja de la persona infectada debe realizarse las pruebas oportunas e iniciar un tratamiento antibiótico en caso de que haya contraído la infección.
  • No se deben compartir los fármacos con otras personas.
  • Se debe acudir al médico de nuevo en caso de que una vez finalizado el tratamiento, los síntomas de la gonorrea persistan.

Posibles complicaciones de la gonorrea

Si la gonorrea no se trata como es debido, puede derivar en ciertas complicaciones de gravedad para la salud. En el caso de las mujeres, las posibles complicaciones de la gonorrea son dolores pélvicos crónicos, enfermedad inflamatoria pélvica, embarazo ectópico, infecciones en el parto y partos prematuros. 

También puede generar infertilidad, siendo una condición a largo plazo, dificultando la posibilidad de conseguir embarazo. Por lo general se produce porque la infección se extiende al útero y trompas de Falopio, lo cual puede provocar la enfermedad inflamatoria pélvica, una afección que favorece la cicatrización del tejido de las trompas. Esto conlleva a una obstrucción de las mismas impidiendo el paso del óvulo y los espermatozoides.

Las complicaciones en los hombres pueden abarcar estrechamiento de la uretra o absceso alrededor de esta. Es posible que desarrolle infertilidad cuando ocurre epididimitis, una inflamación del epidídimo, una estructura tubular que conecta a los testículos con los vasos deferentes. Esto causa un bloqueo dificultando el paso de los espermatozoides.

En ambos sexos, las complicaciones pueden incluir la aparición de infecciones articulares, pudiendo aparecer hinchazón y rigidez de las articulaciones. En cuadros complicados puede generar infecciones de válvulas cardíacas y meningitis. 

Hay que tener en cuenta que este tipo de enfermedad compromete el sistema inmune, por lo que aumenta el riesgo de padecer VIH/SIDA. Y cuando se trata de bebés, al afectar sus ojos existe la posibilidad de que les cause ceguera. Además, pueden aparecer lesiones en el cuero cabelludo y otro tipo de infecciones.

Medidas para prevenir la gonorrea

Hay algunas medidas que pueden ayudar a evitar el contagio de la gonorrea:

  • Usar preservativo en todas las relaciones sexuales vaginales y anales, así como barreras de látex o plástico cuando se vaya a practicar sexo oral.
  • No mantener relaciones sexuales hasta que se haya finalizado el tratamiento y la infección por gonorrea se haya curado por completo.
  • Informar a todas las parejas sexuales recientes del padecimiento de gonorrea para que ellas también se pongan en tratamiento en caso de ser necesario.
  • Someterse a los exámenes ginecológicos y urológicos de manera periódica para detectar cualquier enfermedad de transmisión sexual de forma temprana.
  • Mantener una única pareja sexual para disminuir el riesgo de transmisión.
  • Si una persona parece estar enferma con algún tipo de infección de transmisión sexual, lo mejor es abstenerse de mantener relaciones sexuales y solicitar que se haga una prueba.

También te podría interesar...