Flores comestibles

Flores comestibles

Entre los diferentes alimentos de moda que podemos encontrar para este año 2018, las flores comestibles son, sin lugar a dudas, uno de ellos. Además de aportar un aspecto de lo más elegante y llamativo a los platos, las flores tienen un gran contenido en nutrientes muy beneficiosos para la salud tanto física como mental del organismo.

Lo cierto es que las flores se han venido utilizando durante varios siglos en la cocina de muchísimas sociedades y civilizaciones de todo el mundo. Su aporte no se limita únicamente al sabor y aroma que proporcionan a los platos, sino a sus apreciadas propiedades nutricionales.

Las flores comestibles son muy ricas en vitaminas, así como minerales, proteínas y aminoácidos. Además, determinadas flores mejoran la función del aparato digestivo, mejorando así el tránsito intestinal y evitando enfermedades como el estreñimiento. Una gran cantidad de flores comestibles tienen propiedades antioxidantes, evitando el envejecimiento prematuro tanto de la piel como de las células. Además, este tipo de flores contienen fitonutrientes y flanonoides; dos nutrientes clave para reducir el riesgo de aparición de algunas enfermedades.

Índice
  1. ¿Todas las flores son comestibles?
  2. Propiedades de las flores comestibles
  3. Tipos de flores comestibles
    1. Violetas
    2. Calabaza
    3. Girasol
    4. Flor de los muertos
    5. Diente de león
    6. Capuchinas
    7. Rosas
  4. Mejores flores comestibles para acompañar cada plato
  5. Consejos para consumir flores comestibles
  6. Conclusión

¿Todas las flores son comestibles?

Qué flores son comestibles

Esta es una pregunta que se hacen muchísimas personas en torno a las flores. Pues bien, lo cierto es que no; no se puede añadir al plato cualquier flor que uno se encuentre paseando por el campo. Y es que, del mismo modo que ocurre con las setas, existen flores tóxicas que pueden dar lugar a una intoxicación.

A la hora de consumir flores, es importante destacar que son precisamente las diferentes partes de la flor lo que menos compuestos químicos contiene, de forma que es lo más apropiado para su consumo. Mientras, las semillas suelen albergar una gran cantidad de componentes químicos, muchos de los cuales pueden ser tóxicos. Así, hay determinadas flores comestibles cuyo consumo está totalmente recomendado, pero cuyas semillas no son aptas para el consumo.

Propiedades de las flores comestibles

Uno de los principales beneficios de las flores comestibles en relación a la salud general del organismo es su alto contenido en flavonoides. Tienen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antibacterianas y antivirales.

Además, las flores son muy bajas en calorías ya que el 80% de su composición es agua y el 10% proteína. Son muy ricas en vitaminas; del grupo A para cuidar la salud ocular, del grupo B para transformar todo lo que se consume en energía, y del grupo C para fortalecer el sistema inmunológico. Además, este tipo de flores son ricas  en calcio, fósforo, hierro, y potasio.

Tipos de flores comestibles

Tipos de flores comestibles

Si quieres preparar un plato con las flores comestibles como ingrediente estrella del mismo, a continuación señalamos cuáles son las más indicadas, así como sus características y beneficios para la salud.

Violetas

Las violetas son las flores comestibles más conocidas a nivel global por muchas razones. Por un lado, porque resultan muy bellas, de modo que "visten" cualquier plato. Por otro lado, su sabor es muy suave y agradable. Y, por último, admiten una gran selección de formas de preparación: frescas, confitadas, secas...

En relación a las propiedades y beneficios de las violetas para la salud, son ricas en antioxidantes y vitaminas importantes para el buen funcionamiento del organismo. Así, las violetas previenen el envejecimiento prematuro de las células y de la piel, al mismo tiempo que fortalecen el sistema inmunológico.

Calabaza

Las flores de calabza tienen un sabor muy característico; delicado y suave. Son unas de las más habituales en la gastronomía del Siglo XXI ya que se pueden incluir en todo tipo de platos: carnes, arroces, guisos, ensaladas...

Estas flores son muy ricas en vitamina A, así como en ácido fólico y fibra. Nutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo; la fibra es clave para mejorar el tránsito intestinal.

Girasol

Los pétalos del girasol son muy vistosos, de modo que son una opción estupenda para dar color a cualquier plato. En cuanto a su sabor, se queda a medio camino entre dulce y amargo.

Los pétalos de girasol aportan propiedades muy interesantes para la salud. Un estudio elaborado en Japón demostró que estos pétalos tienen propiedades antiinflamatorias, de modo que resultan de gran ayuda para aliviar los síntomas propios de enfermedades como la artrosis. Además, es sabido que los mayas utilizan los pétalos de girasol para preparar un afrodisíaco natural.

Flor de los muertos

Flor de los muertos

Aunque su nombre cause un poco de reparo, lo cierto es que la flor de los muertos, o cempaxúchitl, es una de las más beneficiosas para la salud general del organismo.

Los aztecas hacían bien uso de ella con propiedades medicinales: aliviar cólicos, mejorar el proceso digestivo, tratar afecciones hepáticas...

Diente de león

Otro de los tipos de flores comestibles más demandados en la gastronomía actual. Tienen un sabor muy dulce, similar al de la miel. En cuanto a sus nutrientes, las flores de diente de león son ricas en vitamina A, vitamina B, vitamina C, vitamina E, vitamina K, potasio, zinc, calcio y hierro.

Es importante que el consumo de este tipo de flores sea con moderación. Y es que un consumo excesivo de las mismas puede dar lugar a reacciones adversas relacionadas con el sistema digestivo, como ardor de estómago y diarrea.

Capuchinas

Las flores de capuchina son actualmente unas de las más utilizadas para decorar diferentes platos, como por ejemplo las ensañadas. De la capuchina se consumen las hojas, las cuales tienen un sabor muy intenso, similar al del berro; también las flores, con sus colores rojizos y anaranjados.

Es importante tener cuidado con las semillas ya que, en función de su estado de formación, pueden llegar a ser tóxicas. Esto se debe a que contienen una pequeña cantidad de glucosinolatos y trierucina; compuestos tóxicos que pueden dar lugar a una intoxicación que requiera de asistencia médica urgente.

Rosas

Las rosas son consideradas en muchos casos como las reinas de las flores, generalmente debido a su gran belleza y a su aroma y sabor característico. En relación a sus nutrientes y propiedades para el organismo, las rosas contienen vitaminas A, B3, C y E; también son ricas en bioflavonoides y antioxidantes. Así, las rosas ayudan a cuidar el sistema cardiovascular, minimizando así el riesgo de sufrir determinadas enfermedades como el infarto de miocardio.

Mejores flores comestibles para acompañar cada plato

Una de las grandes cuestiones a la hora de introducir las flores comestibles en los platos es acerca de qué flores son más adecuadas para acompañarlos.

Pues bien, en el caso de las ensaladas, las flores de albahaca o los pétalos de magnolia son una opción estupenda; tienen un sabor muy suave que ayuda a potenciar de alguna manera el de la propia ensalada.

En cuanto a las carnes y pescados, las flores de romero y de eneldo son la mejor opción. Un acompañamiento fantástico para este tipo de platos.

Las flores comestibles también se pueden servir a modo de guarnición. Las flores de calabaza son una opción fantástica; tienen un sabor un poco dulce uy su textura es muy suave. También los pétalos de girasol, con un sabor amargo que desaparece si se sirven cocidos.

Y, por último, para acompañar los postres con flores comestibles, la amapola y el azahar son fantásticos.

Consejos para consumir flores comestibles

Consejos para consumir flores comestibles

Por último, señalamos una serie de tips que merece la pena tener en cuenta a la hora de consumir este tipo de alimentos.

  • Es importante seleccionar siempre flores que hayan sido cultivadas para el consumo humano. Es la mejor forma de asegurarse de que están libres de cualquier tipo de producto y/o compuesto químico que de alguna forma pueda resultar perjudicial.
  • Si se sufre algún tipo de alergia, lo mejor es introducir el consumo de flores de forma paulatina para comprobar cuál es la reacción.
  • En ningún caso se deben utilizar flores que no sean comestibles, ni siquiera como decoración.
  • Para mantener las flores comestibles frescas se deben colocar en toallas de papel humedecidas, dentro de un recipiente hermético en el frigorífico.
  • Para aprovechar todos los nutrientes de las flores comestibles, la mejor forma de consumirlas es en crudo.

Conclusión

Las flores comestibles se han convertido en uno de los ingredientes estrella de la gastronomía de muchísimas zonas del mundo. Se utilizan habitualmente como guarnición o acompañamiento; las flores como plato único no es por el momento una tendencia muy seguida.

El uso de las flores en la cocina aumenta el valor gastronómico de las distintas recetas; y es que aportan un toque de distinción y color a los platos, además de una gran selección de nutrientes muy beneficiosos para la salud general del organismo.

Tal y como hemos señalado, lo más importante para evitar cualquier tipo de problema relacionado con una intoxicación alimentaria es consumir únicamente aquellas flores que han sido cultivadas para el consumo humano. Y, por supuesto, asegurarse de que las flores que van a ser consumidas no son tóxicas.

Teniendo estas precauciones básicas en cuenta, las flores comestibles son una opción fabulosa para disfrutar de una gastronomía más amplia, propia del Siglo XXI.

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