Cólera

El cólera es una enfermedad producida por un microorganismo denominado Vibrio cholerae. El enfermo infectado, sufre un proceso diarreico agudo con intensa deshidratación que puede provocar la muerte en pocas horas si no se trata de inmediato.

La enfermedad procede de la zona de la India. Se han producido 7 pandemias mundiales desde 1817. En la actualidad ocurre de forma esporádica, salvo en los países endémicos (sur de Asia).

La forma de transmisión es el agua potable contaminada a partir de residuos de un enfermo. La contaminación de alimentos por las heces, puede ser una forma importante de transmisión de la enfermedad entre individuos de la misma familia, así como la transmisión a través de las manos contaminadas.

El cólera necesita una dosis infectiva grande para provocar la infección. No obstante, en individuos con alteraciones del pH gástrico la dosis infectiva es menor.

En regiones endémicas el cólera es principalmente una enfermedad pediátrica, aunque los menores de 2 años tienen menor probabilidad de adquirirla debido a la presencia en su organismo de anticuerpos de la madre transmitidos por la leche materna.

Como curiosidad, cabe destacar que existe diferente grado de riesgo de adquisición de la enfermedad dependiendo del grupo sanguíneo (aunque no se sabe bien la causa): el grupo 0 tiene mayor riesgo que el grupo AB.

Causas del cólera

Vibrio cholerae es una bacteria anaerobia facultativa con crecimiento óptimo a temperaturas de 18-37 °C. Por ello, puede sobrevivir en aguas templadas (medio aerobio) y en el intestino del hombre (medio anaerobio).

Lo que hace esta bacteria es sintetizar una toxina que tiene actividad para destruir las células del intestino, y éste es el mecanismo causante de la enfermedad.

El cólera es transmitido por los enfermos y portadores a través de alimento, agua y manos contaminadas.

Los gérmenes pasan de la boca al intestino. Al pasar por el estómago, debido al pH ácido, las bacterias son destruidas en su mayoría, evitando así que se produzca la enfermedad. En individuos que tienen alterado el pH gástrico, o en caso de que se haya ingerido una dosis elevada del germen, éste es capaz de llegar al intestino delgado en dosis suficientes para producir la enfermedad.

Una vez en el intestino, la bacteria comienza a destruir las células intestinales. Se produce entonces una salida de agua desde el organismo al exterior en forma de diarrea intensa. Hay pérdida de sodio, potasio y bases, principalmente, ya que acompañan al agua en su salida. La diarrea conduce al shock y a la muerte si no se realiza una reposición de las pérdidas correcta e inmediata.

Síntomas del cólera

El período de incubación oscila entre 24-48 horas. La enfermedad se inicia con diarrea acuosa, indolora y brusca que aumenta en cantidad rápidamente y que en muchos casos se acompaña de vómitos.

• Las pérdidas de líquido pueden ser de hasta 1 litro/hora en adultos y 10 mililitros/ Kg /hora en niños, durante las primeras 24 horas. Si el líquido no se repone, el enfermo muere por deshidratación.
• Las pérdidas elevadas de potasio pueden originar calambres musculares y parada cardíaca.
• Las heces son características: líquido grisáceo, turbio, con mucosidad y un olor un poco dulzón.
• Debido a la intensa deshidratación, el paciente tiene sed, hipotensión, debilidad y taquicardia. Puede aparecer somnolencia que alcanza el coma.

Si el tratamiento es correcto, el proceso se resuelve en pocos días y normalmente no deja secuelas.

Diagnóstico y tratamiento

La sospecha del cólera ante la sintomatología, debe confirmarse mediante la identificación del microorganismo en heces por métodos de tinción en laboratorio.

El tratamiento debe empezar lo más pronto posible tras la aparición de los síntomas. Se realiza mediante reposición de líquidos y electrolitos. La fórmula recomendada por la OMS contiene sodio, bicarbonato, glucosa y agua.

Las tasas de mortalidad en personas correctamente tratadas no alcanzan el 1%.

Dependiendo de la gravedad el tratamiento se realizará por VÍA ORAL (preferible, al ser una forma natural) o por VÍA INTRAVENOSA (cuando el paciente tiene muchos vómitos o se encuentra en coma). Para eliminar el microorganismo, se pueden utilizar antibióticos.

Las Tetraciclinas son eficaces aunque no deben utilizarse en niños menores de 8 años, por la toxicidad que ejercen en los dientes y por interferir con el crecimiento. Otros antibióticos eficaces son el cotrimoxazol y el cloranfenicol.

¿Cómo evitar el cólera?

La forma más eficaz de prevenir la enfermedad cuando uno viaja a zonas endémicas, es beber agua siempre embotellada y no tomar hielo.

En la comunidad europea, existen medidas de control del abastecimiento de aguas y normas de obligado cumplimiento en el control de alimentos en establecimientos públicos, que dificultan la presencia de la enfermedad.

Existe una VACUNA en el mercado contra el cólera. Está contraindicada en menores de 1 año. Confiere una inmunidad no completa, por lo que aunque una persona se vacune antes de viajar a una zona endémica, debe respetar las normas acerca del consumo de agua para prevenir la enfermedad.

Todo proceso diarreico agudo es causa de acudir al médico de cabecera. En nuestra zona es muy rara esta enfermedad, pero si usted ha viajado a zonas endémicas, y tiene diarreas debe ponerlo en conocimiento de su médico.

Una medida que debe realizarse en casa ante una diarrea, es la reposición de líquidos o la ingesta de alimentos ricos en agua, hasta poder acudir al médico.