Algidol

Todos hemos experimentado dolor, una experiencia sensorial muy incómoda, malestar general, síntomas que nos hacen sentir una sensación muy desagradable y que afecta todo nuestro cuerpo. Por eso, es vital combatir la sintomatología de dichos dolores a través de medicamentos con un efecto de analgesia. Para ello existe el Algidol. Sus beneficios son amplios, pues ayuda a mejorar tales síntomas, en especial aquellos que tienen que ver con el buen funcionamiento del sistema inmunológico. A través de este artículo sabrás de qué manera es una ventaja para tu salud el uso del Algidol. Toma nota.

¿Qué es Algidol?

El Algidol es un analgesico perfecto para calmar dolores leves o moderados. No es considerado como un clásico antigripal, debido a que es un medicamento que requiere prescripción médica, a diferencia de los demás antigripales conocidos como “especialidades farmacéuticas publicitarias”, y que además pueden venderse sin receta médica. En el caso del Algidol, no encontramos en su composición antihistamínicos y/o vasoconstrictores (descongestivos), por lo que no es una alternativa eficaz para tratar los síntomas de rinitis y congestión nasal.

A pesar de ser un medicamento de excelencia para aliviar los dolores y la fiebre, es de uso delicado y debe ser prescrito por un médico, pues no todos los pacientes lo pueden tomar. Tampoco debe ser consumido en exceso porque puede causar toxicidad debido a sus componentes, en especial el paracetamol y codeína.

Composición del Algidol

El algidol es un medicamento que contiene Paracetamol, Codeína y Ácido ascórbico (Vitamina C). Pertenece al grupo de analgésicos y antipiréticos, especialmente con el propósito de calmar dolores, sean leves o moderados, y cuadros de fiebres. Es vital saber para qué funcionan cada uno de sus principales componentes:

• Paracetamol: También conocido como acetaminofén, tiene propiedades analgésicas y antipiréticas, especialmente eficaz para tratar la fiebre y el dolor leve o moderado causado por afecciones articulares, cefaleas, neuralgias, procedimientos quirúrgicos menores, entre otros.
• Codeína: Se le considera un narcótico. Tiene efectos analgésicos, antidiarreicos, sedantes y antitusígenos. Funciona como tratamiento sintomático de la tos improductiva y el resfriado.
• Ácido ascórbico: Es un ácido orgánico con propiedades antioxidantes. Este ayuda a combatir las infecciones, cicatrizar heridas y mantener los tejidos saludables. Lo podemos encontrar en todas las frutas y verduras. Ayuda a la prevención y tratamientos de estados carenciales de vitamina C

Los demás componentes son sacarina de sodio, sacarosa, povidona, maltosa, sílice coloidal, celulosa microcristalina, aroma de naranja y colorante amarillo anaranjado S (E–110).

Por lo tanto, se puede decir que el Algidol es el indicado para tratar los síntomas, o estados sintomáticos de dolor de intensidad leve o moderada.

Posología o indicaciones del Algidol

Sigue al pie de la letra las instrucciones de este medicamento. No se debe tomar durante más de 3 días. En caso de que el dolor no mejore al pasar los 3 días de tratamiento, consulta a tu médico en busca de otra alternativa.

• Adultos y adolescentes (15 años de edad): Un sobre cada 4 - 6 horas, Siempre que sea necesario, no exceder los seis sobres cada 24 horas.
• A partir de los 13 años de edad, con un peso de 43 a 54kg, administrar un sobre cada seis horas como máximo
• Adultos de edad avanzada: Un sobre cada 8 horas como máximo.

Producto de uso delicado que debe ser administrado solo bajo vigilancia médica.

El Algidol no debe ser consumido con otros medicamentos analgésicos sin antes consultar al médico. Como norma general, siempre es recomendable informar al médico si estamos en tratamiento con cualquier otro medicamento.

Forma de administración: Para su administración debes disolver el contenido del sobre en medio vaso de agua. Este medicamento lo puedes tomar antes, durante o después de las comidas. Siempre y cuando no excedas la dosis diaria recomendada.

Por otro lado, el Algidol FORTE es otra presentación recomendada para cuadros inflamatorios, que presentan dolores fuertes, microcontracturas e impotencia funcional, ya sea de origen traumático, o reumáticos. También está indicado para las afecciones músculo-esqueléticas sean de índole inflamatoria o no. Es recomendable para patologías como: artritis reumatoidea, monoartritis, espondilartritis, ciáticas y lumbociáticas. Asimismo como para artrosis en todas sus formas, hombro doloroso simple, gota crónica articular, síndrome cervicobraquial, neuralgias y neuritis.

De igual manera, este medicamento se debe consumir con precaución, sobre todo en pacientes con antecedentes de úlceras o hemorragias digestivas, ya que el tratamiento prolongado puede causar disfunción suprarrenal. Puede ocasionar trastornos gastrointestinales. No debe administrarse en pacientes bajo tratamientos con corticosteroides. Entre sus reacciones adversas y secundarias encontramos que puede alterar el metabolismo de la glucosa, ocasionar osteoporosis, insomnio, hipertensión arterial y aumento de la tensión intraocular. Al igual que el Algidol común, este debe ser administrado estrictamente bajo vigilancia médica.

Se me olvidó tomar Algidol ¿qué debo hacer?

No tomes una dosis doble para compensar la dosis que olvidaste. Sencillamente, debes tomar la dosis que olvidaste cuando lo recuerdes y tomar las siguientes dosis correspondientes con una separación de al menos 4 horas.

Aspecto del producto y su contenido

Este medicamento se presenta en forma de sobres con granulado para suspensión oral. Cada envase contiene, dependiendo de su presentación, 12 o 20 de sobres de aluminio y polietileno (baja cantidad).

Conservación del Algidol

Mantener fuera del alcance de los niños. No ingerir este medicamento después de la fecha de caducidad que aparece en el envase. No tirar por el desagüe o la basura. Debe ser desechado en un lugar seguro, preferiblemente una farmacia que cuente con el contenedor correspondiente con el propósito de cuidar y proteger el medio ambiente.

Interacciones

• Paracetamol: Puede disminuir la depuración del busulfán (medicamento que actúa retardando o deteniendo el crecimiento de las células cancerosas en el cuerpo). Si sobrepasamos la dosis indicada, la carbamacepina puede aumentar el efecto hepatotóxico. En caso de que no sea así, esto carece de importancia. Se debe administrar con precaución en pacientes con problemas hepáticos, debido a que este medicamento se metaboliza en el hígado. El paracetamol puede tener interacciones con los siguientes medicamentos: anticoagulantes orales, anticolinérgicos, anticonceptivos orales, antiepilépticos, antivirales utilizados para infecciones como el VIH, antituberculosos, diuréticos, antieméticos (para evitar náuseas y vómitos).
• Codeína: Aumenta la excitabilidad con antidepresivos tricíclicos (afectan las sustancias químicas del cerebro aliviando así los síntomas de la depresión). Es un potenciador de la depresión central. Aumenta la acción de los analgésicos. Hay un mayor riesgo de depresión respiratoria si los mezclamos con otros analgésicos morfínicos. Ocasiona estreñimiento y obstrucción intestinal si lo tomamos con antiperistálticos. Se debe tener precaución con pacientes que padezcan insuficiencia hepática.
• Ácido ascórbico: Reduce la concentración de flufenazina en el cuerpo, este es un medicamento antipsicótico para el tratamiento de la esquizofrenia y otros trastornos psiquiátricos relacionados. Aumenta la biodisponibilidad de estrógenos. Reduce los niveles de alcohol en el organismo. Disminuye el efecto de fenotiazinas (medicamento para tratar trastornos emocionales y mentales graves, y reducir las náuseas)

Precauciones al ingerir Algidol

Lo deben tomar solo aquellas personas a las que se lo haya recetado un médico especialista. De no ser así esto traería muchas consecuencias tales como las que se muestran a continuación:

La codeína al tomarla en circunstancias normales, se metaboliza en el hígado a morfina por medio de una enzima, pero a una velocidad muy lenta. Esta sustancia es la que permite el alivio del dolor. Se presenta una variación de esta enzima, pudiendo causar un efecto a las personas de distintas maneras.

En algunos pacientes la morfina se produce en muy bajas cantidades, de tal manera que no proporciona suficiente alivio al dolor. Sin embargo, se debe tener especial cuidado con los pacientes que metabolizan de manera rápida una gran cantidad de morfina, pues puede causar un efecto adictivo.

No está aconsejado usar este medicamento en el embarazo o si estás buscando un bebé. Mucho menos lo deben consumir las madres en período de lactancia, ya que la codeína pasa a la leche materna. Tampoco cualquier persona que sea alérgica a cualquier componente que conforma el Algidol. No lo deben consumir niños menores de 12 años, ni adolescentes con un peso inferior a 43kg.

Además, es importante saber que aquellos pacientes que padezcan las siguientes situaciones deben de consultar siempre al médico y nunca automedicarse, pues puede ocasionar ciertas complicaciones.

• Si sufres de anemia (disminución de los glóbulos rojos en la sangre), alguna enfermedad del corazón o los pulmones, del riñón, si hay alteración en el tamaño de la próstata, una enfermedad del tiroides llamada hipotiroidismo, insuficiencia hepática o de una glándula denominada suprarrenal, debes limitar su uso, siempre y cuando sea el ajuste de dosis recetada por el médico. Y evitar llevar tratamientos prolongados hasta que se consulte al médico.
• Si eres asmático o tienes cierta sensibilidad al ácido acetilsalicílico, evita tomar dosis altas.
• Si alguna vez has sufrido trauma craneal o algo parecido que te produzca una presión intracraneal más elevada, o presentas problemas respiratorios, tendrás que llevar este medicamento con especial precaución. La codeína puede agravar estas patologías.
• Como mencionamos anteriormente, la codeína puede producir a largo plazo una dependencia psíquica y física, lo que a su vez puede generar abstinencia si no la tomas. Por lo tanto, se recomienda que después de un tratamiento prolongado es necesario interrumpir gradualmente su administración.
• No está indicado para tratar la congestión nasal.
• Si eres alérgico a la aspirina debes tener precaución. El Algidol tiene en su composición ácido acetilsalicílico, que contiene el colorante amarillo anaranjado, pudiendo ocasionar ciertas reacciones alérgicas. Las más común: el asma. Pero esto solo ocurre cuando hay dosis elevadas. Por eso es necesario seguir las posologías indicadas por el médico.
• Si estás tomando antidepresivos, anticoagulantes orales, antihistamínicos sedantes o antiácidos, debes tener precaución y consultar al médico.
• No se debe consumir alcohol mientras estés en tratamiento con este medicamento porque puede aumentar la alteración de la codeína. Tanto, que se pueden incrementar efectos nocivos a nivel hepático.
• Si padeces de diabetes o intolerancia a azúcares es recomendable no ingerir Algidol pues contiene sacarosa.
• No se deben realizar actividades que requieran concentración o destreza después de haber consumido dicho medicamento. El Algidol puede causar somnolencia. Por esta razón, si es posible, evita conducir.
• No se puede utilizar Algidol como alivio del dolor en niños o adolescentes tras la extracción de amígdalas o adenoides debido a que se pueden presentar el “síndrome de apnea del sueño obstructivo”.

Sin embargo, estas no son las únicas precauciones que debes tener.

En caso de que debas hacerse un análisis o examen de sangre u orina, se recomienda consultar al médico y quizás suspender el tratamiento con Algidol durante unos días. Los resultados podrían verse ligeramente afectados para la determinación de los siguientes parámetros:

• Glucosa en sangre y orina.
• Ácido úrico.
• Sangre en heces.
• Niveles de paracetamol en orina.

Efectos adversos y efectos secundarios

La codeína puede ocasionar somnolencia, nauseas, estreñimiento, reacciones alérgicas cutáneas, vértigo, depresión respiratoria. Alteraciones hematológicas como: Neutropenia, que es un número anormalmente bajo de neutrófilos (un tipo de glóbulos blancos) y leucopenia, la cual es la disminución de leucocitos en la sangre, y puede interferir en la defensas de cualquier infección. Hepatotoxicidad, enfermedad hepática tóxica provocada por la ingestión de drogas, compuestos químicos u orgánicos que causan daño funcional o anatómico al hígado. Esto puede presentarse si excedemos la dosis de paracetamol superior a 6 gramos al día.

Una dosis elevada de ácido ascórbico puede favorecer a la formación de cálculos renales. El paracetamol puede ocasionar malestar, niveles aumentados de transaminasas hepáticas e hipotensión. En raras ocasiones puede causar una simple erupción cutánea o urticaria (ronchas), hipoglucemia (niveles reducidos de glucosa en la sangre), anemia hemolítica (disminución de glóbulos rojos en la sangre), trombocitopenia (se reducen las plaquetas en la sangre) y efectos renales adversos.

En caso de que se presenten tales síntomas es recomendable ir al médico. Cabe destacar que esto se da en 1 de cada 100 pacientes.